Ayer tuve la suerte de volver a Balaídos después de dos temporadas en blanco(creo) y todo seguía igual. El mismo gentío, o más, ya que jugaba el Celta contra el Barça, los mismos olores(puros de fumar y pipas de comer por igual)y el elemento imprescindible de todo campo de fútbol que se precie: los personajes.
Admito que ya es divertido ver en la tele a un borracho en gallumbos que se intenta tapar el pene con un calcetín, o a dos viejas gritonas cagándose en la madre de un jugador rival, pero lo mejor es cuando lo vives en directo. Ayer tuve la oportunidad de presenciar el show de dos personajes, bastante típicos los dos, cada uno con su espectáculo y con sus frases y gestos característicos. Uno era el gañán y otro era el (en este caso "la") entrenador
(en este caso entrenadora).
El gañán es de sobra conocido, está de más describir sus rasgos o su comportamiento porque todos siguen un mismo perfil. Aún así lo haré: greñas sucias, barba cerda, pinta de malotillo de Vigo, novia rubia y callada que hace que te preguntes porqué está con él y, sobre todo, actitud. Eso es lo que diferencia al gañán de los demás, su actitud. Reconozco que estuvo gracioso con algún comentario que berreó, por ejemplo, a Messi, al que le dijo que era "mas feo que tu puta madre" y luego le sacó un parecido bastante razonable y lo compartió con nosotros gritándole "¡¡Frodo Bolsón de mierda!!". Pero su actitud también se rebela en sus acciones, en sus gestos. Gestos como girarse contra un grupo de aficionados del Barça haciendo un corte de mano con saña gritandoles cosas sobre su concepción de la economía(¡¡agarrados!!), y acciones, como tirarles a otro grupo de barcelonistas una colilla encendida o, después del tercer gol, una revista enrrollada. Al gañán, por supuesto, no le faltaba el amigo makinero(que es como el amigo informático pero en plan Reggetón) que le reía todas las cafradas. Admito que yo lo hice, pero por miedo. Soy un cobarde.
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El segundo personaje es ese hombre que lleva un entrenador dentro y, además, el cabrón lo saca y lo comparte con todos. En este caso era una mujer. Una aficionada celtista de pro. Eso sí, se cagaba en la mayoría de los jugadores. Empezó diciéndole a su amigo de al lado que "Cannobio está muy sobrevalorado en este equipo", que Fernando Vázquez era primero un inútil por poner a Gustavo López en la banda derecha y luego un caprichoso por no haberlo puesto, y luego un tonto por no quitarlo, y después un imbécil por sustituirlo por Aspas...vamos, que hiciese lo que hiciese lo iba a hacer mal. De hecho cerró sus declaraciones al final del partido con un "este partido lo ha perdido el entrenador". También odió, y mucho, a Iriney e increpó a los aficionados del Barça, diciendo que tenía cojones que la gente pagase una entrada para animar al Barça...deberían pagar para criticar al Celta,que mola más.
Nada más, sólo recordad que, como dice la entrenadora(que es esa mujer que os observa en la foto superior), a quien madruga, Dios le ayuda.
Un zapato.